• Olor a césped recién cortado
• El vapor del primer café de la mañana
• Un rayo de sol cuando hace frio
• Encontrarte con un viejo amigo después de 5 años
• Un cielo estrellado
Hay miles de razones para saborear la vida. Tantas como para dejar de hacerlo.
Hazte tu saboreo a medida. Y si tienes tiempo, tu vida también.
¿La mía? Entre otros menesteres, finalizar el día viendo una película de Charles Chaplin con los chicos de Anidan ONGD y verles como la disfrutan.
Fácil, sencillo, para toda la familia (y nacionalidades). Lo bueno de sus películas: que te regalan un mensaje para digerir. Un poco pronto para entender para algunos «pequeños»
Es lo que tienen las películas de Chaplin.